miércoles, 1 de octubre de 2008

El proceso judicial contra Carlos Lozano



“Soy un perseguido político”

*La Dijin está detrás de la provocación. Las pruebas son precarias y así lo sindican de ser integrante de las FARC

*Hernando López

El jueves 25 de septiembre pasado terminó la larga indagatoria a Carlos A. Lozano Guillén, director de VOZ y dirigente del Partido Comunista Colombiano, cuya primera jornada fue el lunes 15 de septiembre. El informe de la Policía judicial de la Dijin, base de la sindicación, es perverso y tendencioso.


Desde los más lejanos rincones del planeta han llegado voces de protesta; Francia le concedió la Orden Nacional de la Legión de Honor y la Unión de Periodistas de Gran Bretaña lo hizo su miembro honorario. En Colombia, importantes personalidades de todas las tendencias políticas, estamentos y sectores sociales se han mostrado consternados, debido a las acusaciones a quien le reconocen una participación importante en los procesos de paz y por el intercambio humanitario. Así lo han expresado el ex presidente Ernesto Samper, el ex ministro y gobernador de Santander, Horacio Serpa, monseñor Luis Augusto Castro, el padre Darío Echeverri, el maestro Carlos Gaviria Díaz, el ex procurador Jaime Bernal Cuéllar, doña Yolanda Pulecio, la ex congresista Consuelo González de Perdomo, Patricia Perdomo, Marleny Orjuela, Ángela de Pérez, Claudia de Jara, Camilo Gómez y numerosos periodistas del país y del exterior, entre otros. Durante las largas jornadas de indagatoria en la afueras del bunker de la Fiscalía General de la Nación, numerosos militantes del Partido y la Juventud Comunista, lectores de VOZ y miembros del Polo Democrático Alternativo se congregaron para expresar el repudio al montaje político y a la amenaza contra los partidos y la prensa de oposición.

La entrevista

-¿Cuál es la sindicación concreta que le hacen?
-El presunto delito es rebelión por pertenecer a la FARC.


-¿Cómo así?
-Sí, por pertenecer a las FARC, por ser miembro de esta organización guerrillera. A esa conclusión llega el informe de la Policía Judicial de la Dijin. No hay una sola prueba concreta de semejante infundio. Todo se deriva de los supuestos hallazgos de la Lámpara de Aladino de Raúl Reyes, de documentos a los que definen de “correos electrónicos” en donde se hablan de cosas a veces incoherentes, pero ninguna entre otras cosas demuestra en qué consiste mi pertenecía a las FARC. Es un exabrupto.

Cargos inanes

-¿Cuáles son esos cargos?


-Por ejemplo, que yo le prestaba dinero a los abogados de Simón Trinidad y de Rodrigo Granda para asistir a su defensa; que era una especie de relacionista político en el país y en el exterior; y que le enviaba a Reyes o a miembros del Secretariado delegaciones juveniles para que les dieran instrucción política y militar. Ni siquiera, aceptando la legalidad de esos correos que no lo son, de su contenido se puede inferir esta última conducta. Se me considera como una especie de infiltrado de las FARC en las altas esferas del Gobierno y la sociedad. Son cosas inadmisibles y traídas de los cabellos. Siempre actúe en mi condición de dirigente comunista y director de VOZ, nunca intervine a nombre de las FARC en nada y jamás invité a nadie a ir a visitar a los jefes de la guerrilla. Es un montaje de la Dijin, un manejo turbio de unos computadores de cuya existencia no tengo certeza. Nunca los vi. Creo que ni siquiera la Fiscalía los ha visto.


¿A qué se debe esa actuación de la Dijin?


-No es una actitud nueva hacia mí. Desde hace años este organismo de seguridad de la Policía Nacional me está haciendo seguimientos y actos de hostilidad. En varias ocasiones, agentes de la Dijin y la Dipol fueron capturados tomándome fotos y videos y en seguimiento hostil. Como no me quedé callado sino que denuncié los atropellos, ahora pasan la cuenta de cobro. Pero en el fondo es un montaje, orquestado desde el alto Gobierno, contra el Partido Comunista, la izquierda y el periódico VOZ. Pretenden equilibrar la balanza con el grotesco y asqueante proceso de la “parapolítica”, que compromete a los congresistas y amigos del Gobierno. Todos los caminos de la “parapolítica” conducen a la “Casa de Nari”. Quieren igualar las cargas y de paso quitarse de encima a la oposición que no tiene vacilaciones ni que concilia por un plato de lentejas. El Partido Comunista Colombiano es de oposición y no vergonzante como la de otros.

Filtraciones tendenciosas


-¿Por qué aparecieron supuestos correos en los medios?


-Es una buena pregunta. Violaron la reserva sumarial. Por eso decidí hablar sobre el tema de la indagatoria. Hay que decir que varios “correos” filtrados a la prensa, en el caso de los que me atribuyen, están modificados con relación a los que reposan en el expediente. Además, agentes de seguridad hicieron correr el rumor de que me iba a escapar para Londres, presionando mi detención. También hicieron correr el rumor en las cárceles de que el guerrillero que declare contra mí recibirá prebendas y reducción de penas. Es el desespero porque lo que tienen es muy frágil. La acusación es ridícula. No culpo a los medios de haber publicado los documentos, hicieron el trabajo periodístico, pero además reconozco que en la mayoría de los casos me dieron la oportunidad de dar mi posición al respecto.


¿Usted qué planteó en la indagatoria?
-Partí de no reconocer la prueba mágica del computador. Insistí en mi condición de periodista y facilitador. Salvatore Mancuso acusó a Francisco Santos Calderón, vicepresidente, de haberse reunido con él y proponerle la creación del Bloque Capital de las “AUC”. Sin embargo, la Fiscalía desestimó la grave acusación y lo exoneró por su condición de periodista y facilitador de paz “en nombre de las víctimas”. Si hay igualdad de todos los ciudadanos ante la ley, pues a mi se me deben reconocer esas dos condiciones, con mayor razón cuando en ninguno de los documentos que me mostraron como “pruebas” aparece invitación alguna a que se forme un frente o un bloque de las FARC.


¿Cómo es lo de la prueba?
-Es ilegal. Está viciada porque de existir fue hallada en un acto ilegal, violatorio de la soberanía nacional como lo reconocieron la OEA y el Grupo de Países de Río en Santo Domingo. La Fuerza Pública colombiana, con ayuda gringa, invadió territorio ecuatoriano después de bombardear el campamento de Raúl Reyes. Fue un acto ilegal y contrario al derecho internacional. Como si fuera poco no se respetó la cadena de custodia, porque al día siguiente fueron filtrados documentos a los medios del país y del exterior, así como hicieron ingresos ilegales para modificar archivos. La Interpol habla de 40 mil archivos cambiados. Pero, además, no vimos los tales computadores, los documentos que me mostraron no son correos electrónicos, sino documentos en formato Word sin firma de nadie, sino con nombres de alias que me atribuyen de forma arbitraria y por analogías y comparaciones absurdas. Se entremezclan hechos ciertos de mi vida familiar y política con mentiras. Aún así, las pruebas de los documentos son nada, generalidades, algo muy precario por cierto. La presión uribista es fuerte. Ahí está el meollo del asunto.


-¿Cómo así?


-Soy un perseguido político. Es un montaje contra el Partido Comunista Colombiano, la Juventud Comunista y sus dirigentes. Quieren asociarnos al Partido Comunista clandestino y al Movimiento Juvenil Bolivariano. Son organizaciones diferentes, de diverso carácter y de estructuras organizativas autónomas. Nada que ver. También la intención es despejar el camino hacia la guerra y los rescates militares. No es casual que todos los encartados en esta provocación política como Piedad Córdoba, Gloria Inés Ramírez, Alvaro Leyva, Lázaro Vivero y William Parra, entre otros, son los que más han trabajado en este país por la paz y el acuerdo humanitario. Los hechos concretos así lo demuestran. Por eso tenemos el reconocimiento de importantes sectores y personalidades de la vida nacional. Es un proceso sin futuro. Soy optimista. Luis Moreno, fiscal de la CPI dijo en El Tiempo, hace unas semanas, que “apoyar a las FARC es una frase ambigua. Lo que yo establezco son responsabilidades penales”, las mismas que no aparecen en el proceso que me adelantan.


Président de la République doit intervenir en faveur de Carlos Lozano


République Française


COMMUNIQUE



Président de la République doit intervenir en faveur de Carlos LOZANO :

Le Président de la République a fait Chevaliers de l’ordre de la Légion d’honneur pour leur engagement en faveur de la paix en Colombie, Carlos LOZANO, directeur de l’hebdomadaire communiste colombien Voz, et le Père Dario ECHEVERRI, secrétaire général de la Commission de conciliation nationale.


Cet engagement légitimement salué par le Chef d’Etat français vaut à Carlos LOZANO de comparaître devant la justice colombienne. Outre la profonde injustice à son égard que constitue ce procès, celui-ci révèle une situation très préoccupante pour l’avenir des otages et pour la paix en Colombie, mais aussi pour l’action des progressistes colombiens. Le Président URIBE tente, par tous les moyens, de faire diversion pour masquer ses propres difficultés et de briser l’opposition démocratique.


D’autres responsables politiques ou parlementaires sont visés : Piedad CORDOBA, Gloria INES RAMIREZ, Wilson BORJA.


J’ai demandé au Président de la République française de les soutenir en exprimant la réprobation de la France auprès des autorités colombiennes.

Paris, le 22 septembre 2008


Madame Nicole BORVO COHEN-SEAT
Vice-Présidente de la Commission des Lois
Présidente du Groupe Communiste Républicain Citoyen
Sénatrice de Paris


Entrevista con Samper


El periódico del Polo publicó en la edición que comenzó a circular esta semana, una explosiva entrevista de Ernesto Samper, en la que tira dardos al gobierno Uribe de grueso calibre, por su política de concentración de tierras, por autocrático, sobre su intento de homologar a Farc y paramilitarismo, entre muchos otros. Hace mención muy especial de Carlos Lozano, director de VOZ de quien reconoce su labor abnegada de facilitación por la paz y el intercambio humanitario

Samper reparte palo ventiao
“El uribismo es una emoción llena de puestos”

Antonio Morales Riveira: El acuerdo humanitario que usted defiende, de una manera quizás mecánica pero no por ello inviable, puede conducir a la solución no violenta del conflicto: ¿O cree que hay que seguir la guerra uribista hasta acabar con las Farc?



Ernesto Samper Pizano: Creo que parte de los problemas que ha encontrado el Acuerdo Humanitario es justamente que muchos sectores que dentro del gobierno piensan que el acuerdo humanitario es una puerta para las negociaciones de paz. Y en el fondo, más allá de Pradera y Florida, lo que a las Farc más les interesa es tener un espacio para hacer un planteamiento político que es a lo que le tienen miedo algunos sectores de derecha dentro del gobierno; el discurso de las Farc tratando de legitimarse políticamente, si eso es posible.



AMR: Pero, si usted fuera de nuevo Presidente ¿iría hasta el final de la guerra o la pararía de una manera unilateral, posibilitando verdaderamente acuerdos? ESP: Estamos en un cruce de caminos histórico, porque reconociendo que el gobierno ha avanzado en la lucha contra la guerrilla y efectivamente le ha dado golpes, hay quienes pensamos que este es el momento preciso para volver a hablarle al país de una salida política y así tratar de negociar en condiciones de ventaja frente a las Farc, con una propuesta de reconciliación. Desde el gobierno piensan que aquí lo que hay que es ir a una dinámica de tierra arrasada y eso no va a conducir al fin de las Farc, sino a un cambio en la forma de la lucha que ya se comienza a insinuar en muchas partes del país. Van a cambiar la lucha ramada por el terrorismo, recurso desesperado de los sectores que se sienten aplastados. “Mis diferencias con Uribe son de fondo”



AMR: Cambio de tercio. ¿Usted sigue siendo social demócrata?



ESP: Creo que sí, sí por social democracia se entiende reivindicar el papel del estado en los procesos sociales, si se entiende ajustar el mercado para el cumplimiento de estos nuevos objetivos sociales, si se entiende el respeto a los derechos humanos en un país tan violento como este, si se entiende el no criminalizar la lucha social. Si eso es social democracia yo sigo siendo social demócrata.


AMR: Se lo pregunto porque en los últimos seis años del gobierno de Uribe, la opinión pública ha sentido que usted se acercaba mucho al presidente Uribe. Entonces ¿usted sigue siendo uribista?
ESP: No estoy contra Uribe pero tampoco estoy con Uribe. Hay muchas cosas que Uribe ha hecho pero que yo no haría, pero que íntimamente como ex presidente pienso que se deberían hacer. Lo que pasa es que yo no hubiera estado dispuesto a pagar los costos en materia de derechos humanos, en materia de sacrificios de acción social, en materia de aplazamiento de otras prioridades, costos que ha pagado Uribe. Y de otro lado, con Uribe las diferencias que he tenido son diferencias de fondo: no estoy de acuerdo en la forma como se negocia el TLC, no he estado de acuerdo en cómo se llevó el acuerdo humanitario. Pero lamentablemente este país ya anda en blanco y negro. Aquí es o se está con Uribe o se está contra Uribe. Y yo creo que eso es lo que precisamente ha anestesiado la política, aquí no hay política, aquí nadie esta haciendo política. Ni el liberalismo, ni el Polo están haciendo política; lo que están haciendo es antiuribismo.


A MR: Entonces usted no está en la oposición, tampoco está en la yuxtaposición con el régimen. Pero su partido que es liberal, el partido de su entraña, el que lo eligió, está en la oposición. ¿Cómo explica eso?



ESP: Depende de que entienda uno por oposición, si oposición es estar contra Uribe, cerradamente, convertir el antiuribismo en una razón política y en un programa político, no estoy en la oposición. Si por oposición se entiende estar construyendo alternativas a lo que hoy en día existe, estar reivindicando que este país no puede renunciar a temas como el respeto a los derechos humanos, a la aplicación del derecho internacional humanitario, al desarrollo social, a tener una posición dependiente multilateral, pues ahí estoy yo. Yo creo que eso no es lo que está haciendo la oposición, ni el Polo ni el liberalismo. Aunque le reconozco que los polvos que se ha echado la oposición, perdóneme que sea tan directo, se los ha echado más el Polo que el partido liberal.



AME: Eso lo llevaría a uno a pensar en la reelección, porque usted de alguna manera está diciendo que no debería continuar Uribe, que al país no le convendría, no solamente la continuidad de Uribe del 2010 en adelante pero tampoco del proyecto uribista, esa “doctrina” potenciado por José Obdulio Gaviria y por el Opus Dei y ese tipo de fuerzas.



ESP: Son dos temas distintos, uno es que en los últimos seis años en este país se armó un proyecto de derecha.



AMR: ¿Usted no cree que es de ultra derecha?


ESP: Bueno de ultra… pero no conocíamos un proyecto de derecha. En este país había empresarios liberales y empresarios conservadores, había curas liberales, curas conservadores, había medios de comunicación liberales, conservadores, inclusive había gente del Polo, había comenzado a haber empresarios del Polo. Hoy día todo el establecimiento cerró filas en torno al proyecto de Uribe y ahí hay un proyecto de derecha. Ahí es donde viene mi diferencia frente a cómo se está ejerciendo la oposición. Frente a ese proyecto de derecha lo que se tiene que construir es un proyecto de izquierda, no un proyecto de anti derecha. Se lo digo de otra manera, que pasa si el día de mañana Uribe dice ya no voy, ¿cual es el proyecto alternativo que tiene la oposición?



AMR: Entre otros la constitución del 91


ESP: Pero eso si es el canto del cisne, eso es volver al pasado. Nosotros tenemos que construir nuevos espacios, estamos en un mundo globalizado. Acá están pasando cosas en Latinoamérica, la gente está manera cerrando filas alrededor de unos proyectos de izquierda radical, otros de izquierda moderada. ¡Que no nos desintonicemos del mundo!
“Estoy contra la reelección”



AMR: Pero de todos modos un proyecto de izquierda es un proyecto de recambio histórico. ¿Está usted definitivamente contra la reelección de Uribe el 2010 de Uribe o en el 2014?


ESP: Estoy contra la reelección, en términos generales. Porque creo que el país tiene suficientes experiencias de cómo la reelección complica la política, asfixia la política, inhibe la aparición de nuevos liderazgos y de alguna manera lleva implícita unas tentaciones totalitarias que son las que se están viviendo hoy en el país.



AMR: ¿Está Uribe mamando gallo? ¿Se la está jugando para el 2014? ¿O qué?

ESP: A la gente hay que creerle y si Uribe dice que el prefiere que la aprueben para el 2014, lo que finalmente me desconcierta es que la misma capacidad que tiene Uribe de orientar a sus huestes parlamentarias para otros temas, al parecer no está funcionando para el tema del referendo. Es decir que si Uribe quisiera ser creíble, que pienso que tiene todas las condiciones para que le país le crea porque tiene un amplio respaldo de opinión, tendría que convencernos haciendo lobby en contra del referendo.



AMR: Hay un escenario que parecería de mayor fuerza potencia, más factible, que es un escenario en el cual en el 2010 Uribe señalará con su dedo como antaño, en otras épocas… Y en el abanico, por la derecha, está Juan Manuel Santos, Vargas Lleras, Noemí Sanín, Carlos Holguín


ESP: A mí me parece perfecto que salgan las nuevas posiciones y que se confronten. La historia muestra que no hay un presidente -y me incluyo entre ellos- que haya tenido la capacidad de elegir a su sucesor. Y aquí no veo que se vaya a romper la regla. Yo creo que si Uribe no va volveremos al juego tradicional de los partidos, pero incluyendo al Polo.



AMR: Aparentemente las cuentas del referendo no son tan claras. El umbral de 7 millones de votos para aprobar la reelección de Uribe, no sería muy fácil de lograr. Ni con la clientela, los consejos comunales, la familias en acción y el unanimismo de los medios…



ESP: Depende, si está de por medio Uribe creo que tiene muchas mas posibilidades de ganarlo que si no está.



AMR: Por el otro lado, existe necesariamente la posibilidad de que se consolide un proyecto de izquierda en el cual probablemente esté su partido, de pronto con el Polo. ¿Cree que desde el punto de vista práctico y pragmático de la política y desde el punto de vista programático, que es el más complicado, se podría dar una opción de una candidatura que se opusiera al proyecto uribista, sea Uribe, sea Juan Manuel o quien sea?



ESP: Discrepo que no haya personas que puedan de alguna forma representar la tendencia centro izquierda del partido.



AMR: Cesar Gaviria nos asombró hace unos meses cuando dijo que el ya no era neoliberal sino socialdemócrata.



ESP: Nunca ha dejado de ser neoliberal y sigue siendo pragmático. El partido tiene tendencias, ahora, hay personas como Alfonso Gómez Méndez como Piedad Córdoba, que tienen también la capacidad de representar ese opción de centro izquierda dentro del partido. Pero yo no limitaría las opciones, aquí hay que pensar la política en dos escenarios, con Uribe y sin Uribe. El escenario con Uribe es que se abre el camino para la configuración de un proyecto de centro izquierda en el cual habría participación de liberales, de gentes del Polo y otra de organizaciones sociales. En América Latina las alianzas que en este momento están llegando al poder, son alianzas de partidos y de organizaciones y movimientos sociales.



AMR: ¿Usted está como coqueteándole al Polo?



ESP: No. Al Polo no hay necesidad de coquetearle, aunque tiene sus partes coqueteables. “El Presidente no se ha bajado de la campaña”



AMR: Hay quien sin ser candidato pero siendo Presidente, recorre el país en campaña, con ruanita, sombrero y consejos comunales…

ESP: Si, yo hasta regalaría la ruanita y el sombrero. El presidente no se ha bajado de la campaña.


AMR: Se están produciendo unos fenómenos curiosos en el país con respecto al centro de la política del gobierno que es la Seguridad Democrática. Uno de esos ejemplos es Medellín. En el anterior número de POLO publicamos un informe en el cual parece que hubiera unas derivaciones muy precisas entre la Seguridad Democrática y una nueva cosa que es la seguridad mafiosa, es decir un renacer de las bandas, un reposicionamiento de las oficinas como la de Envigado, una cercanía de todos esos sectores con el poder político, militar, paramilitar atravesado por el narcotráfico. ¿Cómo ve esa variable de seguridad democrática y seguridad mafiosa?

ESP: Aquí estamos llegando a la nuez del problema que en este momento esta confrontando el país, aquí estamos viviendo un post conflicto sin siquiera haber terminado el conflicto. Tenemos una gran cantidad de gente entre desmovilizados, reinsertados, desplazados, victimas de la violencia, personas afectadas por las minas antipersonales, que de alguna manera son hijos del conflicto pero a quienes no les estamos ofreciendo ningún tipo de espacio, quizá porque estamos concentrando todos los recursos del estado en la guerra: Nos hemos olvidados que hay 3 millones de colombianos que están en el limbo, no han sido adaptados, no han sido reinsertados y lo que puede estar sucediendo es que estas personas, que de alguna manera nacieron de la violencia, especialmente los victimarios por supuesto, mas que las victimas, están recomponiendo pequeñas bandas criminales que se están dedicando a cometer delitos urbanos, muy parecido a los que sucedió con Las Maras, las bandas centroamericanas.



AMR: Apuntaba hacia otro lado. Al de los fenómenos de la para políticas, la yidis política, la para economía. Hay una derivación de la seguridad democrática a través de esos fenómenos de permeabilidad que ha permitido el gobierno, porque los paramilitares son uribistas y eso es una verdad de a puño. Entonces el asunto es que esa seguridad democrática se ha empezado a convertir en una seguridad mafiosa en le sentido de que hay una legitimación de sectores de la mafia a través de un proceso de narcotráfico en el poder. Sectores que visitan la Casa de Nari… ¿Qué piensa de eso?



ESP: Independientemente de la parte coloquial de este debate, que es un poco lo que le sirve de carne mediática, no es un fenómeno que se esté registrando solamente en Medellín, es un fenómeno que se está viviendo en Cali, donde tampoco han logrado salir de la dependencia del narcotráfico.



AMR: ¿Y en el palacio de Nariño?




ESP: El proceso contra los paras tuvo un golpe mortal con la extradición de los jefes paramilitares.



AMR: ¿Qué se buscaba con eso?
ESP: Yo no quiero juzgar intenciones pero ahí si hubo un impacto. Pero independientemente de las intenciones que hubo, fue un golpe muy duro, mortal al proceso de los paramilitares.



AMR: Si usted tuviera de nuevo el poder discrecional de extraditar y le hubiera tocado la petición norteamericana con respeto a los 14 jefes paramilitares, ¿los habría extraditado?



ESP: No porque para mí en ese momento y hoy sigue vigente el conflicto entre dos valores, que es la lucha contra el narcotráfico y la defensa de los derechos humanos. Y si algo me costó a mí con los gringos, fue que siempre puse el tema de los derechos humanos por encima del tema del narcotráfico. AMR: Hablando de paras hubo otro sector, que tuvo una participación en todo ese horror que nos ha tocado vivir. Se empieza a conocer que sectores empresariales desde ámbitos muy altos de la sociedad financiaron el paramilitarismo. ¿Qué tiene que decir sobre eso?



ESP: Espero que con esto no pase lo que sucedió con el proceso 8000 que terminó en los parlamentarios y nadie se puso a averiguar cual es la relación del narcotráfico con los constructores, con las industrias. Con los bancos, con los medios de comunicación, es decir si se trata realmente de hacer una expiación colectiva, esto tiene que comprometer a las personas que en la periferia estaban apoyando los procesos. No puede terminar solamente en que meten a la cárcel a unos parlamentarios.



AMR: ¿Cuál es su punto de vista sobre la utilización en la Operación Jaque de los símbolos del CICR de la Cruz Roja por parte del gobierno y las mentiras del gobierno?



ESP: En este país tan polarizado cuando uno habla de matices piensa en o que se es gay o que no se define, pero a mi si me parece que hay que por lo menos resaltar que estuvo mal que hayan utilizado los signos, pero no se puede comparar la utilización de los signos para liberar 15 personas que estaban secuestradas, a la utilización que en algún momento se hizo en este país de los signos, por ejemplo para transportar armas en ambulancias. AMR: Con una diferencia y es que los que transportaban las armas eran actores ilegales y en este caso fue el Estado.



ESP: No estuvo bien hecho, pero yo no le daría la connotación catastrófica que se le ha dado.
“No podemos aceptar que el computador de Reyes sea la Biblia”



AMR: ¿Hasta qué punto el computador de Raúl Reyes es una caja de sorpresas? ESP: No tengo elementos para decir que lo que está en el computador no sea cierto, ni creo que muchos los tengamos. Yo parto de la base que la información que estaba ahí era auténtica, en el sentido de que estaba en esos computadores. Una cosa es la autenticidad y otra cosa es la credibilidad de lo que esta ahí. Y a mi me parece que ha faltado en el proceso de judicialización de esa información verificar contextos, confrontar contenidos, buscar pruebas de referencia. No podemos aceptar que todo lo que está ahí es una especie de Biblia.



AMR: ¿Usted está diciendo que es un poco un juicio anticipado y mediático? ESP: No. Lo que digo es que una cosa es la autenticidad y otra cosa la credibilidad. A mí me parece absolutamente monstruoso tratar de criminalizar conductas como la que ha cumplidos Carlos Lozano tratando de buscar la paz y buscar el acuerdo humanitario. No pueden utilizar eso sin contextualizar, sin confrontarlo. Para eso se judicializa ese tipo de pruebas. AMR: Carlos Lozano pidió precisamente su participación en el proceso como testigo. ESP: Y estaré encantado de ir. No he conocido de Carlos Lozano sino acciones y actitudes a favor de causas nobles, como buscar la paz, como buscar la devolución de los soldados de Las Delicias como buscar el acuerdo humanitario. Entonces si en este momento nosotros aceptamos que se criminalice la búsqueda de la paz y las salidas políticas, mañana nos llega la criminalización de la lucha social. Y de ahí a la guerra sucia no hay sino un paso.



AMR: ¿Usted de algún modo demerita ese esfuerzo mediático y de la fiscalía de vendernos lo que se ha llamado la Farcpolitica? ESP: Claro, sobre todo el intento de homologar la Farc política con la para política, porque me parece que una cosa es la búsqueda de una salida pacífica a un conflicto armado en el cual están personas en contra del Estado y otra muy distinta es la búsqueda de la verdad en medio de unos grupos que estaban aliados con una gente del Estado para producir masacres, secuestros y acciones militares.



AMR: El choque de la Corte Suprema de Justicia y el presidente. La Corte Constitucional por el lado Uribe. La separación de los poderes anulada, un fiscal que se quiere eternizar: ¿Qué implica para la democracia que todo el poder resida en el ejecutivo?



ESP: Es muy grave el choque institucional porque si alguna cosa nos ha permitido en este país manejar procesos como el narcoterrorismo, la narco corrupción, el tema de la para política, el tema del paramilitarismo, es porque hay una institucionalidad reconocida. Por eso no he querido tomar partido a favor o en contra de la Corte, porque veo que no podemos convertir los apoyos o nuestro juicio crítico contra organismos institucionales en una especie de partido de futbol. Yo estoy con la corte para estar contra Uribe y viceversa. Para mí eso es inaceptable, sobre todo para una persona que ha tenido una responsabilidad de estado, cuya función es preservar la armonía que debe existir entre las instituciones.



AMR: Recurro a su propia sensibilidad cuando me habló del paramilitar que mató a 2400 personas. ¿Usted cree que en ese nivel de crímenes de lesa humanidad 7 u 8 años de pena, como en el sistema de Justicia y Paz, se justifican? ESP: 8, 10 o 12 años sin que la persona cuente toda la verdad de lo que hizo, sin que se le quiten los bienes que obtuvo con procedimientos criminales, me parece es un poco la cuadratura del círculo. Por eso le digo, que de lo que se trata es de una acción integral y todos los procesos de justicia transicional en el mundo entienden que se necesita un cierto espacio de impunidad para que se pueda producir el efecto de la reconciliación.



AMR: Para terminar, ¿el uribismo qué es? ¿Un movimiento?



ESP: El uribismo es una emoción llena de puestos.

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Una visión limitada




*Carlos A. Lozano Guillén

El fin de la semana pasada el fiscal General, Mario Iguarán, declaró que “el conflicto armado en nuestro país tiene dos carburantes: el narcotráfico y el reclutamiento de menores”. Es la visión limitada que el Establecimiento tiene del largo conflicto colombiano. Lejano de una interpretación sociológica realista de la violencia de profundas raíces en un Estado dominante despótico y de marcada desigualdad social. Esta visión es la razón, entre otras, por la cual el conflicto no se ha podido superar por la vía política de la negociación.


El Gobierno Nacional, con la óptica sesgada al analizar los incidentes del conflicto, acusa a los corteros de la caña de Azúcar de estar incitados por las FARC en su protesta social y laboral. Desconoce la superexplotación de que son víctimas por los mezquinos empresarios de la caña. Casi todos los corteros son parte de la población negra, discriminada siempre, a la que ni siquiera le reconocen el derecho a un contrato laboral y a la contratación colectiva. Ahí radica el problema, pero para no afrontarlo con criterio altruista y humanista, los voceros del Gobierno y del Establecimiento, vaciados de motivación social, acuden al argumento de siempre, el viejo expediente reaccionario: “Están infiltrados por la guerrilla; los terroristas son los que dirigen la protesta” y de paso le clavan el puñal al senador Alex López del PDA, uno de los pocos que extiende su actividad política y social en beneficio de las masas más empobrecidas más allá de los fríos salones y pasillos del Capitolio Nacional.

Es la lógica absurda de esta clase dominante y con mayor razón del Gobierno actual indecente que la representa, para sacarle el bulto al interés colectivo y social. Lo suyo es la pequeña, pero poderosa clase capitalista, llena de mezquindades y ambiciones. Es la opulencia del capital en la cual se reflejan todas las bajezas propias de su clase.


El conflicto tiene otros carburantes. El principal de ellos es la desmedida ambición de los capitalistas criollos de preservar sus intereses y privilegios a cualquier costo. Incluyendo la violencia, como lo demuestra la creación del paramilitarismo su criatura diabólica y criminal. La “parapolítica”, que se anida en la “Casa de Nari” es la mejor demostración de ella. Otros factores como la antidemocracia, la intolerancia, la aniquilación física de la oposición, el ventajismo a favor de los partidos tradicionales dominantes, la desigualdad social cada vez más creciente, la entrega del país a las transnacionales y la intervención descarada del imperio del norte, son factores de vieja data, más importantes y definitivos. El narcotráfico (no solo en los alzados en armas sino también en la oligarquía, el Gobierno y el Estado) y el reclutamiento de menores son factores más recientes del conflicto, que junto a la desaparición forzada, el terrorismo de Estado, el secuestro y el desplazamiento, son carburantes, que revelan su degradación.
carloslozanogui@etb.net.co



Declaración al Congreso del Consejo General del la TUC-dice-las investigaciones forman parte de una pauta de la criminalisacion de la protesta social

Congreso de la TUC – 10 de Septiembre 2008- Declaración al Congreso del Consejo General del la TUC

Congreso, un numero de sindicatos afiliados, específicamente la NUJ (Unión Nacional de Periodistas), han expresado preocupaciones sobre el inicio de un proceso jurídico la semana entrante en contra del Dr. Carlos Lozano, director del periódico colombiano, Voz.

Investigaciones empezaron en Mayo en contra de el y otros colegas de la oposición que fueron acusados de tener vínculos con las FARC, incluyendo anteriores dirigentes sindicales, como la Senadora Gloria Ramírez y el Representante Wilson Borja, y nosotros hemos estado en contacto cercano con la CUT desde entonces.

Las investigaciones forman parte de una pauta de la criminalisacion de la protesta social y es un intento mas para demonizar la oposición.

La TUC, y el gobierno británico, se han quejado al gobierno de Uribe en numerosas ocasiones sobre eso.

Nosotros continuaremos a insistir que nuestro gobierno presione a Uribe para que cese de atacar a figuras de la oposición y dirigentes sindicales, porque estos ataques los hacen objetivos para los paramilitares y sofocan el debate democrático.

La CUT ha expresado la opinión que estas investigaciones demostrarán la inocencia de esos acusados.

Justice for Colombia estará buscando juntar recursos para los costos de las defensas y para enviar un sindicalista británico a Colombia, para observar las audiencias, y el Consejo General estará apoyando estos esfuerzos.

Siguen llegando mensajes de solidaridad al director de ★VOZ - la Fundación Madrid Paz y Solidaridad C / Sebastián Herrera Nº 14- MADRID

Fundación Madrid Paz y Solidaridad C / Sebastián Herrera Nº 14- MADRID Tlf. 915063083 - Fax 915062325


Señor Fiscal General de la Nación.
Mario Germán Iguarán
Septiembre 29 2008

La Fundación Madrid Paz y Solidaridad de CC.OO. España manifiesta a Usted su profunda preocupación por la situación actual del periodista Carlos Lozano director del semanarioVoz, quien ha sido involucrado en una investigación por supuestos vínculos con las FARC.

Carlos Lozano es una persona que en numerosas ocasiones lo hemos escuchado haciendo su planteamientos sobre la situación política de Colombia, pero siempre mostrando su preocupación sobre el conflicto y las victimas, a Carlos Lozano lo conocemos mas por su interés en la paz de Colombia, que por cualquier otra actividad política, rechazando toda manifestación violenta y haciendo mucho énfasis en la necesidad de acuerdos humanitarios, la misma postura de la Asamblea de la Sociedad Civil por la Paz y de numerosas organizaciones de los derechos humanos.

Por todo lo anterior señor Fiscal le solicitamos muy amablemente tener en cuenta todos los antecedentes de la trayectoria de Carlos Lozano, un incansable trabajador por la paz de Colombia.

Atentamente
Fdo.: Juan Klett
Director
C.C. Autoridades nacionales e internacionales
N. U.

Director de la Escuela de Cultura de Paz de la Universidad Autónoma de Barcelona (España) , se solidariza con el director de ★ VOZ

Barcelona 29 de Septiembre de 2008

Señor Doctor:
MARIO IGUARÁN
Fiscal General de la Nación
ESD

Ref: Proceso 67.805 por el presunto delito de rebelión contra Carlos A. Lozano Guillén, Fiscal 19 Unidad contra el Terrorismo.

Apreciado Doctor:

En mi calidad de Director de la Escuela de Cultura de Paz de la Universidad Autónoma de Barcelona (España) y responsable de su programa de Procesos de Paz, con la presente carta hago siguiente declaración jurada en relación al proceso de referencia.

A lo largo de los últimos diez años, la Escuela de Cultura de Paz y el que subscribe, ha tomado el compromiso de contribuir a lograr la paz en varios países en conflicto, y de manera más intensa en Colombia. Para lograr este objetivo, la Escuela de Cultura de Paz ha invitado a un número muy notable de personas colombianas del ámbito político, académico, culturas, social, económico, eclesial, etc., para mantener un diálogo que nos permita conocer mejor la situación del país y buscar caminos que puedan conducir a poner fin a la violencia armada que sufre Colombia.

En este sentido, la Escuela de Cultura de Paz y su Director han estado abiertos a escuchar la opinión de personas de todo tipo, pero siempre con el propósito antes mencionado. Como muestra de ello he mantenido conversaciones con la Embajadora Noemí Sanín; el Vicepresidente de la República, Francisco Santos; la ex congresista Rocío Arias; el Alto Comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo; el ex Cónsul en Barcelona y ex Comisionado de paz José Noé Ríos, la ex cónsul María Jimena Dussán, académicos como Camilo González o Alejo Vargas; ex ministros como Rafael Pardo o María Emma Mejía, alcaldes como Lucho Garzón, gobernadores como Antonio Navarro y Angelino Garzón, ministros como Fabio Valencia Cossio, periodistas como Carlos Lozano, miembros del Senado como Carlos Moreno de Caro o Piedad Córdoba, obispos como Monseñor Castro o Monseñor Vidal y una amplia lista de personas de movimientos sociales, negritudes, académicos, así como todos los ex comisionados de paz que ha tenido Colombia. En todos los casos, sin excepción, ha sido la Escuela de Cultura de Paz quien ha cubierto los gastos de estas personas invitadas, excepto cuando se encontraban de paso haciendo escala en Barcelona.

En relación al Sr. Carlos Lozano, puedo y doy fe de que en todas las ocasiones que he mantenido conversaciones con él, sea en mi despacho o en Colombia, ha mantenido una posición firme y clara en relación a su compromiso para terminar con la lucha armada y lograr un acuerdo de paz para Colombia. Doy fe de su honestidad, sinceridad y su profunda convicción de que el uso de las armas no conducirá a la paz. Así me lo ha manifestado siempre y de ahí su compromiso personal, con los riesgos que eso conlleva, de utilizar su influencia como director del semanario Voz y miembro del Partido Comunista (que es legal), para actuar como facilitador o intermediario para lograr no sólo acuerdos humanitarios amplios o parciales, sino también para mandar mensajes claros a las FARC de que la vía de las armas no puede conducir a la paz, sino a ampliar el sufrimiento del país.

Por todo lo expuesto, ruego a su excelencia se tenga en cuenta mi declaración en el proceso abierto al Sr. Carlos Lozano, al que considero de forma profunda y avalo con conocimiento de causa de que se trata de una persona constructora de paz y alejado radicalmente de las ideas o del accionar de grupos que utilizan la violencia para sus fines.

Quedo a su disposición para cualquier clarificación adicional y en el convencimiento de que la Justicia, a través de su persona, atenderá mi declaración.

Cordialmente,





Vicenç Fisas Armengol
Director de la Escuela de Cultura de Paz
Universidad Autónoma de Barcelona
Edificio MRA
08193 Bellaterra
España

Documento Nacional de Identidad: 37649418-M
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Email: Vicenc.Fisas@uab.cat
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