*Darío Tote, miembro de la Comisión Política nacional de la Minga dice que ésta es indefinida hasta que el Gobierno acepte sus demandas. Denuncia amenazas y asegura que el Ministro de Agricultura es un niño consentido de la oligarquía
*Carlos A. Lozano Guillén
El domingo 23 de noviembre pasado acompañamos a Darío Tote, uno de los dirigentes de la Minga de los indígenas, al barrio Nuevo Chile, al sur de Bogotá en la localidad de Bosa, uno de los cinturones populares fundados por la Central Nacional Provivienda, a la sazón presidida por el ex concejal Mario Upegui. Tote llega un poco tarde, debido a que estaba en una reunión de la Comisión Política de la Minga. Sin embargo, curtidos dirigentes del barrio, del Partido Comunista y del Polo Democrático Alternativo lo esperaban con expectativa.
Darío Tote, acompañado de un integrante de la Guardia Indígena, explica las razones de la Minga y la importancia de la solidaridad. “Somos guerreros, nuestras armas son la voz y los bastones”, dice sin aspavientos, para demostrar la firme decisión de luchar hasta el final, no importa en qué circunstancias. Son conscientes, explica, de que su movimiento no puede ceder, porque es ejemplar para los trabajadores y los sectores populares que propugnan por una solución democrática de la crisis colombiana. Terminada la asamblea popular recibe de los dirigentes locales una urna con el aporte económico de los habitantes del barrio y dos enormes bolsas llenas de alimentos y de otras necesidades básicas.
Darío Tote es un veterano líder indígena del pueblo Kokonuko caucano de cuyo Consejo de Mayores hace parte. En la zona centro es miembro de la Comisión Política a la cual pertenece y de la misma hace parte a nivel del CRIC. Es miembro también de la Comisión Política Nacional de la Minga, que es la que toma las decisiones fundamentales de orientación y hoja de ruta. Es de corta estatura, pero de gran velocidad de pensamiento y análisis. Su figura menuda contrasta con la firmeza de su carácter y personalidad. En el XX Congreso del Partido Comunista Colombiano, realizado hace una semana en Bogotá, los delegados y delegadas en reconocimiento a sus méritos y a su destacada presencia en la Minga indígena, lo eligió al Comité Central con la más alta votación. Con orgullo reconoce que él materializa, junto a otros camaradas, la presencia de los comunistas en la más importante movilización popular en Colombia de los últimos años.
No desaprovechamos la oportunidad de entrevistarlo para el semanario ★VOZ.
¿Qué balance haces de la Minga hasta hoy domingo 23 de noviembre al mediodía?
-Estamos contentos con esta ganancia. Hicimos lo que teníamos que hacer en defensa de nuestros derechos. Obligamos al presidente Uribe Vélez a sentarse en La María y a escucharnos.
Obligamos a 13 ministros a debatir con nosotros nuestras propuestas. Hicimos la marcha desde el Cauca hasta Bogotá, superando varios escollos como en Ibagué donde el Gobierno Nacional nos prohibió la entrada y entramos en medio del respaldo popular. Nuestro tema es nacional, es reflejo de un conflicto de muchos años y de incumplimientos a los derechos de nuestros pueblos indígenas. Esta minga es por nuestra dignidad, por nuestros derechos”. También superamos las amenazas y las intimidaciones. Lo más importante es que hemos recibido el aliento solidario de los estudiantes, de las amas de casa y de muchos colombianos. En esta lucha está comprometido nuestro futuro y lo más importante fue la decisión de hacerla. La Minga es indefinida hasta lograr nuestros objetivos. Podemos permanecer aquí o regresar a nuestros territorios pero la lucha continúa.
¿De qué amenazas hablas? ¿En qué consistieron?
-Bueno, concretamente fue en Ibagué cuando llegamos. Dos personas de civil y armados preguntaron quiénes eran los ‘dueños del baile’. La Guardia Indígena actuó y los tipos desaparecieron. Cuando llegamos a Soacha nuestra Guardia detecta dos personas de civil armadas preguntando por nuestra consejera Aida Quincué, por Feliciano Valencia y nuestro coordinador de la Guardia regional. Desafortunadamente lograron escapar, pero nosotros hemos hecho la denuncia. Pero también existen amenazas de las “Aguilas Negras” y anuncios del Gobierno donde ofrece recompensas por los dirigentes indígenas. Hay una amenaza circulando que dice: ‘Mate un indio y reclame una libra de arroz’.
¿Qué dijo el Gobierno ante las denuncias?
-Esto ya está a nivel internacional, las denuncias de Ibagué y los atropellos a nuestra Consejera y a nuestras mujeres ya está en conocimiento de organizaciones internacionales. Hemos dejado el precedente a nivel internacional que si algo le pasa a un minguero o a cualquier participante de la Minga es responsabilidad del Gobierno Nacional.
¿Cómo interpretar la actitud desafiante del ministro de Agricultura, Andrés Felipe Arias, quien dijo el sábado 22 de noviembre pasado, en la reunión con los trece ministro que si por él fuera no le daría ni un centímetro de tierra a los indígenas?
-Al señor Ministro del Agricultura le hemos dicho que él es el único responsable de lo que le suceda al movimiento indígena en lo que tiene que ver con tierras. Él ha dicho que se congelan los diálogos y las negociaciones con los indígenas. Él quiso involucrar al movimiento indígena con un atentado a unos militares en Caloto. Eso lo rechazamos con mucha fuerza. Arias es un niño caprichoso y consentido de la oligarquía y contradice los compromisos del presidente Uribe en Las María.
¿Cuáles son los puntos más concretos de la negociación con el Gobierno?
-Son: derechos humanos, territorio, acuerdos ya pactados y no cumplidos, resarcimiento del buen nombre del movimiento indígena y el Tratado de Libre Comercio. Son los puntos álgidos y concretos de la Minga, aunque también hemos planteado la paz como solución política y el intercambio humanitario. Los que no se logren concertar con los ministros se llevan al debate.
¿Qué viene ahora?
-Viene la reunión con los viceministros y una comisión mixta, luego tendremos una reunión con los ministros y la Minga, esperamos también el encuentro con Uribe que lo ha estado dilatando en medio de campañas distractoras como el asunto de las pirámides. Volveremos a nuestros resguardos a fortalecer la solidaridad con nuestros compañeros Nasa de Tierra Adentro por el desastre natural de la última semana. Si no hay solución definitiva a nuestras demandas volveremos a las fincas a liberar la madre tierra. La Minga es indefinida si el presidente persiste en negar nuestros derechos. Esperamos un pronunciamiento del Presidente, para nosotros la Minga, la resistencia y la movilización son legales, son derechos que nos asisten.
-Por último, un mensaje que quieras enviar a los lectores de ★VOZ. -En primer lugar, saludar al nuevo Comité Central y al Comité Ejecutivo del Partido Comunista. Saludo por este medio tan importante a los hombres y mujeres que dieron su voto de confianza y su voto de dignidad para que yo fuera elegido a la dirección nacional del Partido en el XX Congreso, en el cual no pude estar por razones de encontrarme en la Minga. A los lectores de ★VOZ les hago llegar mi saludo y mi voz de resistencia y los invito a seguir leyendo y difundiendo ★VOZ para que pronto logremos un cambio con democracia y justicia social.
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